Esto lo cambia todo. La industria está muerta. Nunca ha habido un mejor momento para ser artista*
La revolución digital de la última década ha resaltado y puesto en escena la creatividad y el talento de muchos artistas que hasta entonces habían sido totalmente anónimos ante la falta de oportunidades y/o recursos. Se trata de una evolución que ha transformado el modo en que creamos, distribuímos y consumimos la cultura desencadenando importantes cambios en la industria.
La democratización de la cultura ha supuesto el acceso a una mayor cantidad de obras de arte, cine, música, literatura, etc. aunque ello no significaba que todas tuviesen el mismo nivel de calidad. Con el paso del tiempo la red de redes se ha visto inundada de obras y artistas de toda clase, muchos de los cuales han acabado ahogándose ante la inmensidad del océano digital ¿democracia cultural, mediocridad cultural o un poco de ambos?